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La biotech catalana Minoryx fortalece su presencia en Valonia.

Traducción de un artículo publicado por Olivier Gosset en el periódico l’Echo el pasado 18 de febrero de 2020:

La empresa biotecnológica española Minoryx eligió Bélgica para su nuevo ensayo clínico.

El ecosistema biotecnológico belga sigue atrayendo a empresas extranjeras que vienen aquí en busca de los conocimientos y recursos para impulsar su desarrollo.

En doce meses, la filial valona de la empresa biotecnológica española Minoryx Therapeutics ha estado muy activa: un año después de que se estableciera en el Biopark de Gosselies, el pequeño equipo belga puede atribuirse el lanzamiento de un nuevo ensayo clínico que se suma a dos estudios europeos iniciados anteriormente.

Fundada en 2011, Minoryx trabaja en el desarrollo de tratamientos contra enfermedades neurodegenerativas huérfanas que conducen a graves trastornos motores e incluso a la parálisis completa. “Las patologías en las que se enfoca Minoryx son enfermedades genéticas raras sin tratamiento hasta la fecha, con riesgo de deceso en una etapa avanzada de degeneración”, explica Didier Le Normand, consejero delegado del sitio belga y director financiero del grupo. Su fármaco candidato más avanzado, una pequeña molécula llamada leriglitazone (MIN-102), se dirige a la adrenomieloneuropatía (AMN), que es la enfermedad genética más extendida en esta categoría. La indicación está en la fase clínica 2/3 con 116 pacientes en Europa y en los Estados Unidos.

Modificación de una molécula

Con sede en Mataró, cerca de Barcelona, Minoryx ya ha recaudado hasta la fecha un total de 50 millones de euros, incluso una Serie A sostenida en 2015 por fondos internacionales, como los de Caixa Capital Risc, Ysios Capital, Kurma Partners, Roche Venture y Chiesi Ventures.

Su fundador, el investigador Marc Martinell, trabajó con dos científicos académicos en una molécula utilizada para el tratamiento de la diabetes y la ha modificado en una nueva molécula con un potencial de acción directa sobre el sistema nervioso central.

En 2018, la empresa decide expandirse internacionalmente. Su interés se centró en Valonia, cuyo ecosistema atrae cada vez a más perlas extranjeras. Ellas vienen a buscar los conocimientos y los recursos, incluidos los financieros, permitiéndoles impulsar aún más su desarrollo. Minoryx se está afianzando en Bélgica: un grupo de inversores belgas liderado por Fund +, al que se han unido en particular los fondos públicos SFPI, SRIW y Sambrinvest, ha inyectado 21,3 millones al capital de la empresa, que ha abierto una filial en Valonia.

Estrechamiento de la médula

Objetivo: dar una base europea a un estudio clínico lanzado en una nueva indicación para la misma molécula.

Esta, la enfermedad Ataxie de Friedreich, es otra enfermedad neurodegenerativa, que se manifiesta por un estrechamiento de la médula espinal. El estudio está dirigido por el sitio belga, y la Región Valona ha otorgado una subvención. “Incluye 39 pacientes en cinco países, incluso un sitio en Bélgica (Erasme) con el profesor Massimo Pandolfo” comenta Delphine Van den Eede, que conduce el ensayo. “El parámetro principal es la medida de la médula espinal por IRM. También observamos cómo evoluciona el paciente a nivel motor y de la fuerza muscular y realizamos pruebas llevadas por biomarcadores”.

Los resultados de los diferentes estudios se conocerán a finales de año. La molécula obtuvo la indicación de medicamento huérfano por parte de las administraciones de medicamentos americana (FDA) y europea (EMA). En la perspectiva de la futura comercialización de los tratamientos, la empresa tiene como objetivo la construcción de una organización europea con un papel central operacional de su entidad belga.